
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-TCP) condenó la prórroga de las sanciones impuestas por el Consejo de la Unión Europea (UE) contra altos funcionarios e instituciones de Nicaragua, calificándolas como medidas ilegales, arbitrarias e injerencistas.
“Estas sanciones, expresión anacrónica de colonialismo y supremacismo, se suman al despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe y forman parte de una agenda intervencionista que busca criminalizar y aislar a los gobiernos soberanos de Nuestra América”, señaló la organización regional en un comunicado.
El bloque de integración expresó su respaldo absoluto al Gobierno de Nicaragua y ratificó su solidaridad con los copresidentes Daniel Ortega y Rosario Murillo, así como con todos los funcionarios afectados.
“Frente a esta nueva agresión, el ALBA-TCP reafirma que Nicaragua no está sola y exige a la Unión Europea a levantar dichas medidas injerencistas, que causan graves daños al bienestar del pueblo nicaragüense”, citó la comunicación escrita.
La alianza reafirmó que los países miembros mantendrán una posición conjunta de defensa de la soberanía, la autodeterminación y la integración regional.
Asimismo, aseguró que ningún “poder imperial” podrá doblegar el espíritu de independencia de los pueblos latinoamericanos y caribeños, resaltando que la unidad continental es el camino para garantizar la paz y la justicia social.




