Bombas de fabricación estadounidense fueron lanzadas por el ejército israelí sobre vecindarios civiles, durante ataques perpetrados en Gaza. Los restos de estos armamentos fueron encontrados en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza.
El 8 de mayo, en medio de la intensificación del ataque israelí en Rafah, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró que se había «pausado» el envío de varios miles de bombas de 500 y 2,000 libras.
Esta declaración, sin embargo, no tuvo ningún efecto ante los 35,000 palestinos que han sido asesinados en la Franja de Gaza, con el apoyo del armamento estadounidense financiado por Washington.
Israel asesina civiles en Gaza con armamento de EEUU
Biden, en una entrevista, reconoció que el Ejército de Israel usa armas suministradas por el país norteamericano para asesinar civiles en Gaza. “Los civiles han sido asesinados en Gaza como consecuencia de esas bombas y otras formas en las que van tras los centros de población”, afirmó.
La administración Biden ha continuado autorizando el envío de armas a Israel, permitiendo así la continuación de la agresión militar en la que que han perpetrado crímenes de guerra contra la población palestina, en Gaza.
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En declaraciones a la BBC, el coronel retirado estadounidense Joe Buccino afirmó que Israel aún puede «arrasar» Rafah con las armas estadounidenses ya en su poder.
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Buccino añadió que la pausa en el envío de armamento es «algo intrascendente» y «un poco de juego político para tranquilizar a la opinión pública en Estados Unidos que está preocupada por esta situación».
