En un comunicado, el bloque, informó sobre la adopción de una maniobra para poner un «tope», a los productos provenientes de Rusia.
En un comunicado, el bloque, informó sobre la adopción de una maniobra para poner un «tope», a los productos provenientes de Rusia.

Los países miembros del G7 adoptarían medidas para “frenar” los precios del combustible ruso, sin embargo, expertos aseguran que esto solo agudizaría la crisis energética por la que ya atraviesa Europa.

«El suministro de ciertos servicios sólo se permitirá si el petróleo y los productos petrolíferos se compran a costos de tope» que a su vez dependerá de «una serie de aspectos técnicos» que se evaluarán en un consenso, indicaron los miembros del G7 conformado por Reino Unido, Japón, Estados Unidos, Francia, Alemania Italia y Canadá.

Asimismo, los representantes de Finanzas de los países, señalaron que, la medida establece «implementar una prohibición completa de servicios que garantizan el transporte marítimo del crudo ruso y productos derivados».

¿Una medida «para dañar a Rusia» o aumentar más la «crisis en Europa»?

Al mismo tiempo, el grupo ha subrayado que, la nueva disposición, pretende dañar las finanzas de Rusia, y será un mecanismo para debilitar la «capacidad» del país euroasiático, principalmente en su dominio de los «precios energéticos» en el mundo. 

Rusia continuará importando petróleo a los países que no adopten las medidas del G7. Foto: Referencia
Rusia continuará importando petróleo a los países que no adopten las medidas del G7. Foto: Referencia

Sin embargo, expertos internacionales advierten que por mucho que los países que conforman la agrupación, digan que el acuerdo tiene beneficios directos, pues garantiza la continuidad del acceso al crudo a precios tope, la decisión será «catastrófica» para Europa, que en este momento ya está viendo los efectos de sus propias sanciones.

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«Los precios del crudo y gas van a seguir elevados» por mucho más tiempo, aseveró Fernando Moragón, experto en geopolítica, quien, además, destacó que en ese juego político «hay dos perdedores: Ucrania y la Unión Europea», sostuvo al ser consultado por la cadena de noticias RT.  

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Entre tanto, Dmitri Peskov, portavoz del gobierno de Vladímir Putin, expresó que la decisión del G7, no obstaculizará que Rusia continúe con el suministro a países aliados y que está dispuesto a mantener el intercambio comercial con Moscú. También, refirió que Rusia evitará que el hidrocarburo llegue a aquellos países que decidan poner un tope al precio de los combustibles.