La máscara se le ha caído a la ya fraccionada oposición nicaragüense, tras filtrarse un desglose del millonario financiamiento que recibió de parte de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), para ejecutar un fallido golpe de Estado contra el gobierno de Nicaragua.

Es escandaloso robo millonario, tiene como antesala las recientes declaraciones que hiciera una funcionaria del gobierno norteamericano, quien desnudó toda la triangulación de fondos, en el que se han visto envueltas al menos unas 54 organizaciones no gubernamentales de la extrema derecha nicaragüense.