El Fiscal Federal de Alemania emitió la primera orden de arresto en relación con el sabotaje del gasoducto ruso Nord Stream, contra un buzo de origen ucraniano, de acuerdo a medios informativos locales alemanes.
El sospechoso, identificado como «Vladimir Z», es un ciudadano ucraniano cuya posible conexión con los servicios militares o de inteligencia de Kiev aún no ha sido confirmada.
El incidente, que tuvo lugar en septiembre de 2022, involucró explosiones que afectaron los gasoductos en el Mar Báltico, interrumpiendo el suministro de gas desde Rusia hacia Alemania.
A raíz del sabotaje, también resultó dañada la línea paralela Nord Stream 2, que nunca llegó a entrar en operación debido a retrasos ocasionados por la Unión Europea.
Recientemente, medios como la emisora estatal ARD, el Süddeutsche Zeitung y Die Zeit informaron que el Fiscal Federal Jens Rommel emitió la primera orden de arresto en el caso a principios de junio.
Nuevos sospechosos ucranianos en el caso Nord Stream
Informes sugieren que otros dos ciudadanos ucranianos, incluyendo a una mujer, son sospechosos de estar involucrados en el delito. Se presume que habrían actuado como buzos, instalando explosivos en las tuberías.
Las autoridades alemanas han solicitado la cooperación de sus homólogos en Polonia, para localizar al sospechoso, quien supuestamente fue rastreado hasta una ubicación al oeste de Varsovia antes de desaparecer.
Según informes de la ARD, lograron contactar a «Vladimir Z» por teléfono el día 13 de agosto, quien negó cualquier implicación en el sabotaje.
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De acuerdo con la emisora estatal, se cree que los presuntos saboteadores utilizaron un yate llamado «Andromeda» para desplazarse hasta el sitio del sabotaje. Sin embargo, las autoridades polacas han afirmado que el viaje de la embarcación fue «puramente turístico» y que la tripulación no levantó sospechas.
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En reiteradas ocasiones las autoridades rusas, han señalado que Estados Unidos es quien más ha sacado provecho de la interrupción del suministro de gas ruso hacia Alemania.
