El Secretario General de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, realizó un llamado urgente a la acción climática global ante la grave amenaza que representa el aumento acelerado del nivel del mar, especialmente para las islas del Pacífico.
“El aumento del nivel del mar es una crisis creada enteramente por la humanidad. El mundo debe actuar y responder a este SOS antes de que sea demasiado tarde”, apostilló Guterres.
Dos nuevos informes revelan que esta crisis, causada por el cambio climático, pone en peligro la existencia de naciones insulares y la vida de millones de personas.
Los datos presentados por Guterres son impactantes: el nivel del mar en la capital de Tonga ha subido el doble de la media global desde 1990, y las temperaturas en la superficie del océano Pacífico Sur han aumentado a un ritmo mucho más rápido que en otras regiones.
Las consecuencias de esta situación son devastadoras. La erosión costera, las inundaciones y la pérdida de tierras fértiles están poniendo en peligro la vida de las comunidades insulares. Además, el calentamiento y la acidificación de los océanos amenazan los ecosistemas marinos y la biodiversidad.
ONU solicita acciones inmediatas
Ante este panorama, la ONU instó a los gobiernos a tomar medidas drásticas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, acelerar la transición hacia energías renovables y aumentar la inversión en adaptación al cambio climático.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha señalado que el aumento del nivel del mar, junto con el calentamiento y la acidificación de los océanos, está poniendo en grave riesgo la viabilidad socioeconómica y la propia existencia de las islas del Pacífico.
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«Se espera que los 2.000 metros superiores del océano sigan calentándose debido al calor excesivo acumulado en el sistema de la Tierra por el calentamiento global, un cambio que es irreversible en escalas temporales de siglos y milenios», indicó el informe.
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En este sentido, el llamado de la ONU señaló que: el mundo debe actuar ahora para «proteger a las poblaciones más vulnerables» y evitar una catástrofe climática de dimensiones sin precedentes.
