Soldados de las Fuerzas Armadas rusas, empleando el sistema de misiles Iskander-M OTRK, destruyeron un buque cargado con municiones para el ejército ucraniano en el puerto de Yuzhny, en Odesa. El buque procedía de países europeos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El comunicado oficial del ministerio ruso destaca: “Una dotación del sistema de misiles tácticos Iskander-M de las Fuerzas Armadas de Rusia llevó a cabo un ataque con misiles en el sitio de descarga de un portacontenedores en el puerto de Yuzhni, localizado en Nóvie Beliari. Este buque transportaba un lote de municiones y armas procedentes de Europa a la región de Odesa”.
Durante el proceso de descarga de las municiones, se produjo el ataque, y un video difundido por el Ministerio de Defensa ruso muestra la explosión de las municiones y el buque envuelto en llamas.
Desde el inicio de la operación militar especial el 24 de febrero de 2022, Rusia ha declarado que sus objetivos son proteger a la población de un “genocidio perpetrado por el régimen de Kiev” y abordar las preocupaciones de seguridad nacional ante el avance de la OTAN hacia el este.
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De esta manera, las fuerzas ucranianas están siendo respaldadas militarmente por esta alianza de 32 países, con Estados Unidos a la cabeza.
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El gobierno ruso ha enfatizado repetidamente que la OTAN «está jugando con fuego» al proveer armas a Ucrania, y ha advertido que los convoyes extranjeros que transporten equipo militar serán tratados como «objetivos legítimos» por su ejército una vez crucen la frontera.
