Volodímir Zelenski, propuso intercambiar territorios con Rusia, sugiriendo ceder zonas de la provincia rusa de Kursk, incursionadas por sus tropas en agosto.
Sin embargo, Zelenski, en la entrevista a The Guardian admitió desconocer qué territorio solicitar a cambio, pues considera que todos tienen igual relevancia.
La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, rechazó enérgicamente la propuesta y aseguró que Zelenski intenta disimular el fracaso militar ucraniano en Kursk.
La diplomática rusa advirtió: «En la provincia de Kursk, a los neonazis que guerrean allí les espera una [parcela de] tierra sin canje alguno, de un metro por dos de superficie y un metro y medio de profundidad».
El presidente ruso, Vladímir Putin, confirmó en noviembre pasado que las bajas de Kiev en la provincia "son colosales", las cuales en ese entonces superaban los 30.000. pic.twitter.com/8pH1XGYIV1
— JP+ (@jpmasespanol) February 11, 2025
Según el presidente ruso, Vladímir Putin, las bajas ucranianas en Kursk superan las 30.000 y su incursión no respondió a objetivos militares, sino políticos. Advirtió que la ofensiva solo agravó la situación de Ucrania, dejando a sus tropas en una posición crítica.
Moscú mantiene su postura sobre las provincias de Donetsk, Lugansk, Zaporozhie y Jersón, que en 2022 fueron anexadas tras consultas populares, al igual que Crimea en 2014.
Rusia exige que Kiev retire sus tropas de estas regiones y reconozca su estatus como parte de la Federación Rusa.
Mientras tanto, las negociaciones dependen de la posición de Occidente y de la nueva administración de Estados Unidos, a la que Zelenski apeló en su declaración a The Guardian, en busca de respaldo diplomático.
