Rusia rechazó el discurso “antirruso” del presidente de Francia, Emmanuel Macron, pronunciado en la reunión de jefes de Estado Mayor de los países europeos y Reino Unido, por lo que aseguró que representa una amenaza para Moscú.
“Es una amenaza para Rusia. Si nos considera una amenaza, convoca a una reunión de los jefes de Estado Mayor de los países europeos y el Reino Unido, dice que es necesario utilizar armas nucleares, se prepara para utilizar armas nucleares contra Rusia, sin duda es una amenaza”, precisó el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, aseguró que Francia “busca una continuación de la guerra” y calificó el discurso de Macron como: “extremadamente confrontacional”.
“Francia ya está dispuesta a utilizar sus armas nucleares por motivos de seguridad y así sucesivamente. Esto ya es una retórica nuclear, una reclamación de liderazgo nuclear en Europa, lo que es muy, muy confrontacional”, enfatizó Peskov.
En la reunión emergente, Macron propuso abrir un debate estratégico, sobre el papel de la disuasión nuclear francesa en la protección de Europa.
Francia apunta al liderazgo de la seguridad en Europa
El presidente francés sugirió que este debate buscaría definir el papel de Francia en la seguridad de Europa, y subrayó la necesidad de fortalecer la defensa del continente ante posibles amenazas.
Asimismo, destacó que Francia asumiría su responsabilidad en la protección de sus aliados, dejando abierta la posibilidad de coordinar estrategias con otros países europeos.
Además, el político galo no descartó el despliegue de tropas europeas en apoyo al régimen de Kiev, una vez se firmen los nuevos acuerdos de paz y se opuso a un alto el fuego que considere “demasiado frágil” para los intereses colectivos.
“No importa con qué banderas se cubra esta operación —con las de la UE o las banderas nacionales de los países que envían los contingentes— […] de todos modos serán las tropas de la OTAN”, refutó Lavrov.
