La cifra de víctimas por los atentados ocurridos en Amalfi (Antioquia) y en Cali (Valle del Cauca), Colombia, aumentó a 18 fallecidos y más de 70 heridos, según informaron las autoridades, generando indignación nacional y la condena del Gobierno.
“Estamos ante un acto terrorista que asesina civiles desarmados para proteger las rutas del crimen”, declaró el presidente, Gustavo Petro, quien señaló a las disidencias de las FARC y a la denominada Junta del Narcotráfico como responsables de los hechos.
Circulan imágenes de carro bomba que estalló en las inmediaciones de la base aérea de Cali, Colombia, causando decenas de heridos, según reportes preliminares. Las autoridades investigan el hecho, calificado como atentado terrorista, mientras se refuerzan las medidas de seguridad… pic.twitter.com/zf9zC3bUTD
— JP+ (@jpmasespanol) August 21, 2025
En Antioquia, un helicóptero militar fue derribado, provocando la muerte de ocho uniformados. En Cali, la una explosión cerca de la base aérea Marco Fidel Suárez dejó seis fallecidos y decenas de heridos, entre ellos ocho menores y tres adultos mayores.
Tras la tragedia, el Gobierno realizó un Consejo Extraordinario de Paz y Seguridad en Cali, donde se decidió militarizar zonas estratégicas y ofrecer una recompensa de hasta 400 millones de pesos (cerca de 100.000 dólares) para dar con los responsables.
Al menos tres personas murieron y nueve resultaron heridas tras una serie de siete atentados con explosivos, incluidos cuatro con coches bomba, en Cali, Colombia, según autoridades policiales. pic.twitter.com/hrDBB6aPfB
— JP+ (@jpmasespanol) June 10, 2025
En paralelo, las autoridades de Antioquia investigan la posible participación en el derribo del helicóptero.
