La presidenta, Claudia Sheinbaum, desmintió que su administración tenga relaciones comerciales con la industria bélica de Israel, asegurando que el Gobierno federal no adquiere armamento ni participa en programas de adiestramiento de origen israelí.
En rueda de prensa, subrayó que esta política es consistente con la postura internacional que ha sostenido México en materia de derechos humanos.
Aunque reconoció que, en años anteriores, entidades federativas realizaron compras de equipo militar israelí, precisó que estas adquisiciones ocurrieron en 2004 y fueron gestionadas de manera local.
“Hubo una compra de armamento a Israel solicitada por estados, desde 2004, ya se cumplió hace tiempo, pero no hay entrenamiento (militar) ni tal relación» detalló la mandataria mexicana.
En línea con su postura crítica hacia el conflicto en Medio Oriente, la mandataria reiteró que considera como un “genocidio” la agresión armada del Gobierno de Israel sobre la Franja de Gaza, los cuales han dejado más de 66,000 víctimas mortales, de acuerdo con fuentes de las autoridades palestinas.
Asimismo, Sheinbaum condenó la reciente intercepción de la Flotilla Global Sumud por parte de fuerzas israelíes, un hecho que ha sido criticado por organismos internacionales.
