Los recientes ataques que Ucrania lanzó contra buques mercantes en la zona económica exclusiva turca, ubicada en el mar Negro, pusieron en riesgo la seguridad marítima y el medioambiente, informó el presidente Recep Tayyip Erdogan, quien calificó la ofensiva como una “preocupante escalada”.
“Los ataques a buques mercantes en nuestra zona económica exclusiva marcan una preocupante escalada», declaró Erdogan, denunciando que estas acciones amenazan “la seguridad de navegación, la vida y del medioambiente”.
Moscú informó que lanchas no tripuladas ucranianas atacaron los petroleros Kairos y Virat, de bandera gambiana, mientras se dirigían al puerto ruso de Novorossiysk.
Días después, otro ataque dejó fuera de servicio un sistema de amarre estratégico del Consorcio del Oleoducto del Caspio, que integra a empresas de Rusia, Kazajistán, EEUU y Europa Occidental.
La portavoz rusa María Zajárova afirmó que los servicios especiales de Kiev “publicaron videos con evidencias” de su participación en los ataques y condenó el respaldo de actores externos.
Aunque Occidente sancionó a los petroleros por supuestamente transportar crudo ruso, Moscú rechaza operar una “flota en la sombra” para evadir restricciones.
