El fiscal especial, Robert Hur, del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Joe Biden, en un informe describió al presidente, Joe Biden, como «un anciano simpático con buenas intenciones y mala memoria».
Hur concluyó, que Biden «retuvo y reveló intencionadamente materiales clasificados después de su vicepresidencia cuando era un ciudadano privado». Sin embargo, entre las razones para eximirlo de los cargos se citan «limitaciones significativas» en su memoria, destacando su dificultad para recordar eventos importantes.
Reacciones sobre la salud mental de Biden
Sobre el informe, los republicanos, han expresado preocupación por la igualdad ante la ley y la capacidad del presidente para el cargo.
En este sentido, James Comer y Mike Johnson, señalaron el informe como «profundamente inquietante», advirtiendo que alguien incapaz de rendir cuentas por el manejo de información clasificada no es apto para la Oficina Oval.
En una entrevista realizada el pasado noviembre, el exmédico de la Casa Blanca y actual congresista, Ronny Jackson, detalló sobre el rápido deterioro de las capacidades cognitivas del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
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En este sentido, Jackson, quien ha atendido la salud de tres presidentes estadounidenses, enfatizó la necesidad de intervención por parte del círculo íntimo de Biden, argumentando que «ya no es apto ni física ni cognitivamente para el cargo».
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Durante una aparición en el programa ‘Sunday Morning Futures’, Jackson subrayó el deterioro acelerado, respaldando su opinión con su experiencia en el cuidado de presidentes y sugiriendo que Biden no está en condiciones de manejar las responsabilidades del cargo.
