En respuesta a los recientes ataques perpetrados por naciones occidentales en el territorio de Yemen, el gobierno de Rusia ha solicitado con urgencia una reunión en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU).
Estados Unidos y el Reino Unido fueron directamente señalados por el gobierno ruso, instándolos a explicar las circunstancias de los acontecimientos en el país árabe a través del Consejo de Seguridad de la organización.
Además de Washington y Londres, también se subrayó la participación en la ofensiva militar contra Yemen de Australia, Bahrein, Canadá y los Países Bajos.
Los ataques recientes de las fuerzas estadounidenses y británicas impactaron las ciudades yemeníes de Saná (capital), Al Hudayda y Taiz, donde se registraron explosiones violentas de gran magnitud.
La condena de Rusia a los ataques
El gobierno ruso condenó los bombardeos ejecutados por Estados Unidos y el Reino Unido, calificándolos como «otro ejemplo» de la «distorsión de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas» con el objetivo de «intensificar la situación en la región».
María Zajarova, portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, expresó que «los bombardeos estadounidenses en Yemen son otro ejemplo de la distorsión por parte de los anglosajones de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y su total desprecio por el Derecho Internacional».
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En este contexto, Zajarova anunció que el gobierno ruso presentará en detalle su posición aestos acontecimientos en una rueda de prensa que se celebrará en las próximas horas.
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La posición de Rusia enfatiza la necesidad de abordar la situación en Yemen de manera transparente y respetuosa con las normas internacionales, rechazando cualquier acción que pueda intensificar las tensiones en la región.
