China aseguró que las declaraciones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), sobre el derribo de los objetos aéreos en Estados Unidos y Canadá “no son más que especulaciones nefastas”, e instó a esa alianza a que “deje de crearse enemigos imaginarios”.
La respuesta de China, se desencadenó tras los comentarios del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien afirmó que estos objetos “son la prueba de que China y Rusia “están incrementando las actividades de vigilancia e inteligencia”.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, instó a la OTAN a que deje de acusar infundadamente a su país; y que deje de sobrepasar los límites y “actúe en interés de la paz y la estabilidad mundiales”.
El presidente Xi Jinping, en días pasados dijo que el globo derribado, el 4 de febrero, sí era chino, sin embargo, nunca tuvo fines militares ni de espionaje, como acusó Estados Unidos.
Recientemente el periódico The Washington Post, reportó que militares y el servicio de inteligencia de Estados Unidos, habría dado seguimiento al globo chino, durante casi una semana, desde su lanzamiento.
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De acuerdo a los analistas de inteligencia, existen indicios que China no planificó el ingreso del globo en el espacio aéreo de Estados Unidos, sino que fue un hecho ante el cambio de los vientos a gran altitud.
