Miles de personas tomaron las calles de Buenos Aires, para expresar su rechazo al controvertido homenaje a miembros de la dictadura de 1976-1983, impulsado por Victoria Villarruel, candidata a vicepresidenta de La Libertad Avanza, una agrupación de ultraderecha liderada por Javier Milei.
El evento, que buscaba honrar a señalados de genocidas y reivindicar la dictadura militar, se llevó a cabo en la legislatura porteña, donde la alianza de derecha Juntos por el Cambio ostenta mayoría.
Victoria Villarruel en el centro de la controversia por su apoyo a la dictadura militar
Victoria Villarruel, conocida por su negación del terrorismo de Estado y su defensa de la dictadura militar (1976-1983), argumentó que «el Estado en democracia nos está violando los derechos humanos para garantizarle la impunidad a un grupo de violentos que hoy gozan de libertad y de las garantías que les da nuestra democracia».
El homenaje, fue catalogado como «negacionista» por organizaciones de izquierda y derechos humanos, entre estos, los Hijos Desaparecidos, Recuperados por Abuelas de Plaza de Mayo y Madres Fundadoras de Plaza de Mayo, quienes expresaron su repudio. Se instalaron vallas en todas las entradas de la Legislatura y se desplegó a policías de la ciudad y fuerzas de infantería, lo que resultó en enfrentamientos.
Villarruel, con lazos familiares a la dictadura militar, ocupó un lugar en el salón dorado de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires para afirmar que, «durante 40 años las víctimas del terrorismo fueron desaparecidas de la memoria y barridas bajo la alfombra de la historia».
Argentinos denuncian que son 30 mil las víctimas de la dictadura
También la política de ultraderecha, declaró que los militares «sufrieron» a manos de «aquellos que quisieron imponer una tiranía de izquierda», refiriéndose a las organizaciones armadas de los años 70.
El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, que reúne a cerca de 300 organizaciones de derechos humanos, políticas, sociales, sindicales y estudiantiles, condenó el homenaje, señalando que «solo constituye una reivindicación a los autores del genocidio y sus cómplices». Destacaron que en Argentina no hubo una guerra entre dos bandos, sino un terrorismo de Estado con 30 mil víctimas directas y crímenes de lesa humanidad que no prescriben.
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La fórmula que lidera Victoria Villarruel, junto al ultra Javier Milei, obtuvo un tercio de los votos en las elecciones primarias de agosto, lo que ha generado preocupación entre quienes aducen defender los valores democráticos.
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Dentro de la Legislatura, Carlos Enrique Pisoni, hijo de militantes de izquierda desaparecidos, expresó su inquietud: «Esto es revanchismo. No podemos tener, a 40 años de la democracia, a una vicepresidenta que no defienda los valores de la democracia. Dice un montón de barbaridades que no podemos naturalizar».
