En los últimos años, se ha concretado un crecimiento exponencial de la Inteligencia Artificial (IA), como herramienta y alternativa para distintas necesidades, sin embargo, una polémica se ha desatado al respecto.
No es de extrañar que surjan debates alrededor del uso y el alcance que tienen las inteligencias artificiales en el mundo, y tampoco es raro que sean los referentes de la tecnología y la ciencia que opinen sobre esto.
Elon Musk, presidente de Twitter, firmó junto a otros mil expertos una petición para frenar el avance en Inteligencia Artificial durante seis meses, pues estos alegan que los laboratorios se encuentran en una carrera fuera de control para desarrollar y utilizar mentes digitales más potentes que nadie, que ni siquiera sus creadores, pueden entender, predecir o controlar de manera fiable.
En contraste a esto, Yann LeCun, profesor de ciencia de datos en la Universidad de Nueva York (EEUU), enfatizó que, no tiene sentido hacer una pausa en las investigaciones y que regular una herramienta que no existe aún es prematuro.
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Bill Gates, fundador de Microsoft, tildó a la tecnología artificial como revolucionaria y enfatizó que, como la mayoría de los inventos, podría ser usada para bien o para mal, que se necesitan identificar las áreas difíciles de estas tecnologías.
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No obstante, es importante señalar lo que planteó el célebre escritor, Isaac Asimov, en la Ley de la Robótica, referente a las inteligencias artificiales, donde argumentó que el uso de una herramienta no debe ser peligroso, y que debe realizar su función de manera eficiente a menos que esto perjudique al usuario.
