En una decisión judicial en Nueva York, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, junto a dos de sus hijos, resultó culpable por prácticas fraudulentas realizadas a lo largo de varios años durante la construcción de su poderío inmobiliario.
Entre los culpables del delito relacionado fraude financiero, se encuentran los vicepresidentes de Trump Organization, que son los hijos del ex inquilino de la Casa Blanca: Donald Trump Jr. y Eric Trump; quienes al igual que su padre no podrán dirigir ninguna empresa.
Declaraciones financieras falsas por parte de Trump
La resolución del juez, Arthur Engoron, sostiene que el exmandatario y su empresa engañaron deliberadamente a bancos, aseguradoras y otras entidades al inflar de manera significativa el valor de sus activos, y exagerar su patrimonio neto en la documentación utilizada para cerrar acuerdos y obtener financiamiento.
Según la fiscal general, Letitia James, las declaraciones financieras anuales presentadas por Trump inflaron su patrimonio neto en hasta 2,230 millones de dólares y, en algunos casos, hasta en 3,600 millones de dólares. Entre los activos cuyo valor se sobrestimó se incluyen la finca de Trump en Mar-a-Lago (Florida), su ático en la Torre Trump de Manhattan, así como varios complejos de oficinas y campos de golf.
El juez Engoron ha concluido que la Fiscalía ha demostrado la responsabilidad de los acusados, que también incluyen a Allen Weisselberg y Jeffrey McConney, dos ex ejecutivos de la Organización Trump. Como resultado, el juez ha ordenado la revocación de las licencias de negocio de todos los acusados en Nueva York.
Trump sufre un golpe a su legado empresarial
En los próximos días, se espera que los acusados propongan hasta tres personas para supervisar la disolución de las empresas relacionadas con las licencias revocadas, según lo estipulado en la sentencia.
Esta decisión llega días antes del inicio de un juicio sin jurado en la demanda presentada por la fiscal James, marcando un duro revés para la reputación de Donald Trump como magnate inmobiliario.
Trump, su empresa y sus principales ejecutivos habrían mentido repetidamente sobre ellas en sus estados financieros anuales, obteniendo beneficios como condiciones de préstamo favorables y primas de seguros más bajas, según el juez Engoron.
El magistrado considera que estas tácticas cruzaron una línea y violaron la ley, rechazando el argumento de Trump de que una cláusula de descargo de responsabilidad en los estados financieros lo exoneraba de cualquier delito.
La sentencia de Engoron, que resuelve la principal acusación en la demanda de James, deja otras seis acusaciones pendientes. El origen de la demanda se remonta a marzo de 2019, cuando la declaración ante el Congreso de Estados Unidos del ex abogado de la Organización Trump, Michael Cohen, planteó dudas sobre el «estado financiero potencialmente fraudulento» de la compañía.
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Además de este caso, que será llevado a juicio en menos de una semana, Trump enfrentará cuatro casos penales separados en 2024, abarcando un total de 91 cargos. La mayoría de estos delitos están relacionados con el presunto manejo de materiales clasificados en su residencia en Florida (40 acusaciones), y los pagos supuestamente ilegales a una actriz porno durante su campaña presidencial en Nueva York (34 acusaciones).
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También se enfrenta a 13 acusaciones relacionadas con la ley estatal de crimen organizado en Georgia, en relación con intentos de revertir los resultados electorales, y otras 4 acusaciones en Washington D. C. vinculadas al mismo tema, relacionadas con sus afirmaciones falsas de fraude electoral y múltiples estratagemas.
