Estados Unidos cancela programas de financiación destinada a grupos opositores de Cuba, Nicaragua y Venezuela, quienes se dedicaban a promover la desestabilización, la violencia y la injerencia en esos países de Latinoamérica.
La suspensión de los fondos millonarios se da tras considerar que ya no son de «interés nacional». La medida fue tomada en contra de sectores políticos, religiosos y medios de comunicación señalados de promover injerencia extranjera, intentos de golpes de Estados, desestabilización, y que han desatado caos y violencia en la región con financiamiento exterior.
De acuerdo a la nueva medida estadounidense, se destacó que, “los contratos no estaban alineados con las prioridades de la agencia y no eran de interés nacional” para Washington, según medios estadounidenses.
Desplome presupuestario para autollamados “medios independientes”
El gobierno estadounidense señaló que el dinero gastado en estos financiamientos no ha dado ningún resultado para sus supuestos objetivos iniciales. El recorte también impacta a medios apadrinados por USAID y la NED, agencias también son acusadas de promover la injerencia y forzar cambios de gobiernos; debilitando su operación en estos países y golpeando a los autollamados «medios independientes» que operaban con millones de dólares estadounidenses.
El Instituto Republicano Internacional recomendó eliminar 95 de los 98 programas destinados a opositores de Cuba, Nicaragua y Venezuela; reflejando un posible cambio de enfoque hacia los intereses nacionales de La Casa Blanca.
Además, el bloqueo millonario para grupos opositores, también afecta a los autollamados “medios independientes” patrocinados por USAID y la Fundación Nacional para la Democracia (NED). Ambos organismos han sido acusados de generar injerencismo político en diversos países a nivel mundial.
