En medio de tensiones crecientes, los países miembros de la Unión Europea (UE) podrían optar por aplicar la sanción política más severa contemplada en el Tratado de la UE contra Hungría.
De esta manera, la amenaza surge ante la posibilidad de que Budapest bloquee, por segunda vez, el paquete de ayuda de 50 mil millones de euros destinado a Ucrania.
Según informa el medio “Politico”, los líderes de la UE podrían recurrir al artículo 7 del Tratado de la UE, despojando a Hungría de su derecho a voto en la comunidad.
En este sentido, dicho artículo representa la medida punitiva más extrema contra un Estado miembro, y varios funcionarios europeos expresan su disposición a adoptarla si Budapest persiste en obstaculizar la asistencia financiera a Ucrania.
«Si Orbán bloquea realmente de nuevo un acuerdo [sobre la asistencia a Ucrania] en la cumbre de febrero, utilizar el artículo 7 para despojar a Hungría de su derecho a voto podría convertirse en una opción real», señala un diplomático de la UE.
No obstante, la posible aplicación de esta medida genera divisiones dentro del bloque, con algunas voces expresando preocupación acerca de sus implicaciones futuras y el impacto en la unidad europea.
Alumnos paises en Europa temen un precedente por la acción contra Hungría
En este sentido, países de Europa Central y del Este temen el precedente que podría sentar esta acción, según indican algunas fuentes cercanas a los diplomáticos europeos.
Analistas señalan que la amenaza de aplicar el artículo 7 es real y destacan la necesidad de que el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, “comprenda las consecuencias”.
«Es hora de que Orbán se dé cuenta de que la amenaza del artículo 7 ya existe», advierte Steven Van Hecke, profesor de política europea en la Universidad KU Leuven (Bélgica).
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El pasado diciembre, Hungría vetó la asignación de 50 mil millones de euros para Ucrania, argumentando que la cuestión de la ayuda a Kiev sería examinada en el próximo año (2024), «después de la preparación adecuada».
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La decisión de este veto, por parte del líder húngaro, se fundamenta en que la asistencia financiera de la comunidad europea destinada a su país permanece en un estado de congelación.
